miércoles, 1 de julio de 2009

"La tarde del 3-0 a Vélez empezó todo"

El capitán Goltz recuerda el último cruce y le pone fecha de partida al fenómeno Huracán. "Ojalá se repita el domingo", sueña Paolo.

EL DEFENSOR, UNO DE LOS EMBLEMAS DEL GLOBO, VIVE EN BOEDO.
"ACÁ TAMBIÉN HAY MUCHOS QUEMEROS, ¿EH?", SE JACTA.


En aquellos bares bien porteños, de arrabal, con aroma a ese Buenos Aires de antaño que aún perdura en la imaginación del padre de esta criatura, también surge la pregunta, repentina, genuina: ¿Cuándo habrá empezado este fenomeno que enamora a propios y extraños?

Paolo Goltz, emblema, símbolo y capitán de este Huracán que reinventó la forma de jugar en el fútbol doméstico (según las autorizadas palabras que escribió Roberto Perfumo en Olé hace una semana) ya encontró la respuesta. "Creo que la tarde del 3 a 0 a Vélez empezó todo esto. Me parece que la confianza que se les dio a Pastore y Defederico arrancó ese día. Allí empezó el proyecto y, sobre todo, Angel dio una idea de cuáles eran los jugadores que quería para conformar el equipo".

Aquella tarde de diciembre, entonces, última fecha del Apertura 08, cinco jornadas después del arribo de Cappa, se exhibió la primera versión remixada de este equipo que está a cuatro días y un punto de gritar campeón. Un paseo repleto de toques, triangulación, llegada por sopresa, paciencia para encontrar el hueco fueron las cualidades, al cabo, que mostró el Globo aquel día y que pregona una rueda después.

-¿Sería interesante repetir un resultado así, no?
-¿Qué te parece? Más vale que sí. Ojalá se pueda encontrar una diferencia en los primeros minutos. Sería muy tranquilizador.

-Desde hace tiempo que vienen hablando de la posibilidad de jugar una final con Vélez...
-Es que con la seguidilla de triunfos, viendo cuáles eran nuestras posibilidades y cómo estábamos jugando, empezamos a confiar de verdad en nuestro juego y allí comenzamos a gestar esto. Ahora estamos muy felices y es imposible no disfrutar esta semana. Pero haber soñado llegar a esta instancia nos da más ánimos para convencernos de que podemos dar el último pasito.

El que habla es un tipo común, diría el Francisco más famoso de estos días. Es el pibe que con 24 abriles padeció cuatro años en la B, gozó con la vuelta a la A, disfrutó de los goles a San Lorenzo y se convirtió en el jugador del pueblo quemero: "Son muchas las pálidas que pase. La imagen que jamás podré sacarme de la cabeza es la final por el ascenso contra San Martín, en San Juan. Tengo la espina clavada. No pude ni siquiera ascendiendo una semana después frente a Godoy Cruz. Hoy, esa situación me da fuerzas y aliento".

-Convertiste tres goles en el torneo, ¿soñás con el cuarto en la final?
-Sería una fantasía. Si no soy yo el que haga el gol que lo haga cualquiera, o que no lo haga nadie porque el empate nos hace campeones, je.

-¿Para demostrar que son los mejores les falta dar el último paso?
-Decían que nos ibamos a caer físicamente en la quinta fecha. Nadie se acuerda de esas críticas. No nos escondemos y queremos jugar este partido porque nuestra situación es inmejorable y está demostrado. Ahora, queremos salir campeones. No hay otra.

No hay comentarios: